El país vecino, realizará en las próximas semanas los primeros embarques de carne vacuna a Japón. En este sentido, la carne uruguaya tendrá que competir con dos grandes productores de feedlot como Estados Unidos y Australia.
En este sentido, cabe destacar que dichos países competidores tienen una tradición exportadora con el país asiático a través de sus cortes de abundante marbling.
En cuanto a Uruguay, en un principio exportará pequeños volúmenes, ya sea en carne a grano o pasto, aunque hay expectativas para la concreción de negocios con carne procesada para hamburguesas. Siendo un producto muy popular en Japón.
Este último punto, favorece al mercado estadounidense ya que el 60% de su producción se consume bajo la modalidad de carne picada, destinada a la fabricación de hamburguesas, pan de carne o chacinados.
En el caso de la carne enfriada, la localización geográfica juega un rol protagónico, ya que desde Uruguay, la travesía del flete marítimo dura entre 45 a 50 días, reduciéndose notablemente la vida útil de los cortes envasados al vacío. Japón consume alrededor de 1,5 millones de toneladas de carne anuales, de las cuales 860 mil toneladas son importadas, dando un alto valor a los cortes enfriados.
En esta ventana exportadora que se abre para Uruguay, un dato para nada menor será la desventaja por los altos aranceles que deberá pagar para la introducción del producto, siendo de un 38,5%, contra el 27% que paga Australia.