Los inversores se muestran optimistas en el inicio de semana con subas entre 1,5%-2% en Europa y Wall Street , mientras siguen de cerca los datos semanales de solicitudes de subsidio por desempleo a medida que se acelera la reapertura de la economía global.
Además, serán importantes los resultados de los minoristas arrojarán algo de claridad sobre el gasto de los consumidores en plena pandemia del coronavirus, mientras que el martes conoceremos los datos sobre el contrato de próximo vencimiento de futuros del crudo del West Texas Intermediate.
La semana pasada, Wall Street cerró en baja. En el balance de las últimas cinco ruedas, el Dow Jones ha perdido un 2,65%, el S&P 500 un 2,26% y el Nasdaq 100 un 0,73%. Mientras que en Europa la tendencia no fue muy distinta, con rojos del 4% y 5%.
En este escenario, según el análisis técnico, la clave pasa por que el S&P 500 resistía sobre el soporte de los 2.790 puntos, algo que por el momento consigue, y gracias a lo cual mantiene con vida la continuidad del rebote que nació en los mínimos de marzo.
Entre los inversores a lo largo de la semana se ha reavivado de nuevo la tensión entre EE.UU. y China, esta vez, con la tecnología como excusa y Huawei, de nuevo, puesta en el foco de Donald Trump.
En tanto, el brote de coronavirus en EEUU no termina de estabilizarse y la Reserva Federal envió dos señales claras al mercado: la situación es muy delicada y la pelota está en el tejado del gobierno, que debe accionar la política fiscal ante el poco recorrido que le queda a la monetaria, cuyo siguiente paso ya es situar las tasas de interés en terreno negativo.
En este escenario, será clave como evolucionen las tensiones que resurgieron con la restricción en las exportaciones de ciertos productos tecnológicos de compañías Chinas.
Por cierto, hoy las acciones chinas cerraron al alza debido a que los inversores tomaron las expectativas de los datos que mostraban que los precios de las viviendas subieron en abril, pero las renovadas tensiones comerciales entre Pekín y Washington y la amenaza de una segunda ola de infecciones por coronavirus limitaron las ganancias. El índice referencial del mercado avanzó un 0,26% a 3.922,91 puntos, mientras que el Shanghai Composite escaló un 0,24% a 2.875,41 unidades. En Japón, el Nikkei ascendió un 0,48% a 20.133,73 puntos.
En este marco, los rendimientos de la deuda soberana también cayeron. La tasa de los bonos del Tesoro americano retrocede y gira en torno al 0,64% y el dólar se fortaleció alcanzando máximos de las últimas tres semanas.
En este sentido, los analistas buscan referencias para entender que tan desigual será la recuperación, y a qué ritmo se irá volviendo a la normalidad teniendo en cuenta que tan fuerte y duradero será el impacto de la pandemia en todo el mundo. Por este motivo, el mercado laboral norteamericano, qué sufriendo importantes pérdidas, sigue en la mira. Según las cifras oficiales, y por encima de lo esperado, un total de 2.981 millones de estadounidenses presentaron un seguro de desempleo durante la semana que finalizó el 9 de mayo. Así, acumula casi 36.5 millones peticiones en los últimos dos meses. Donde, solo durante el mes de abril se perdieron unos 20.5 millones de empleos, llevando la tasa de desempleo a un 14.7%.
Por su parte, el petróleo también ascendió con fuerza ante nuevos recortes, no esperados, en la producción de algunos países ajenos a la OPEP, según explicaba la agencia Internacional de la Energía. Por cierto, en estos momentos el petróleo WTI opera con una suba del +6% a US$ 31.