En el medio de la guerra comercial, CME Group, una de las más grandes compañías estadounidenses de mercados financieros, está analizando la posibilidad de cerrar nuevos contratos de soja brasileña.
Dada la disputa entre las dos potencias, Beijing perjudicó a los productores de soja estadounidense cuando aumento un 25% el arancel sobre la oleaginosa como respuesta a la medida que tomó el presidente de Estados Unidos Donald Trump al aumentar los derechos aduaneros sobre las mercancías.
Estos cambios hicieron que crezca el valor de la soja brasileña. Según Reuters los cargamentos que salen del puerto de Paranaguá (Brasil) se venden a 384 dólares por tonelada, mientras que los que parten del Golfo de México estadounidense cuestan 336 dólares.
El CEO de CME, Terry Duffy aseguro que la firma esta «liderando un esfuerzo para ver cómo podemos colaborar en un producto de derivados entre una bolsa brasileña y el CME» pero no especificó cuál es plaza en cuestión.
Paralelamente, la financiera ya cuenta con una asociación estratégica con B3 que incluye la cotización cruzada de determinados productos. La cotización cruzada incluye un contrato de futuros sobre soja pequeños.
Según la experiencia de Duffy, uno de sus mercados de futuro adquirido por la firma en 2007, probó llevar a cabo un contrato de este calibre pero decidió no continuarlo.
En julio S&p Global Platts, la empresa proveedora de precios de referencia y análisis para los mercados de energía y materias primas, comenzó a publicar las evaluaciones de los precios diarios de la soja en los puertos brasileños de Paranaguá y Santos, y ,además, la soja entregada en el norte de China. En este marco, CME ya ofrece una lista de algunos contratos de futuros liquidados en efectivo basados en índices de precios de S&P.