La faena de hembras está en el 46,8%, por encima del límite de 45% que se toma como indicador de etapas de liquidación o retención.
De acuerdo a un informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra), la actividad de la industria frigorífica vacuna experimentó un nuevo retroceso durante noviembre de 2018, considerando las estadísticas preliminares.
Mientras la faena total disminuyó, la faena de hembras creció durante noviembre. En total se faenaron 505,5 mil hembras, es decir casi 1% más que en noviembre de 2017.En cambio, se faenaron 575,5 mil machos, lo que arrojó un retroceso de 7,5% anual.
En consecuencia, la participación de las hembras en la faena total ascendió hasta 46,8% en el undécimo mes del año, indicó Ciccra.
«La demanda externa de China y Rusia tracciona la faena de vacas, cuya importancia relativa subió un 17,1 %. Por otro lado, la aguda restricción crediticia que transita la economía argentina está llevando a los productores ganaderos a desprenderse también de vaquillonas, las que también han elevado su participación en la faena total de 10,2% a 12%», informa Ciccra.
La Fundación Mediterránea, en un informe firmado por Juan Manuel Garzón, agrega que «es elevada la tasa de faena de hembras, un fenómeno que debe revertirse. Esto sólo será posible con precios de hacienda más atractivos».