La recaudación tributaria registró en julio un incremento de 24% respecto a igual mes de 2019, al sumar ingresos por $ 559.091,9 millones, comunicó la Administración Federal de Ingreso Públicos (AFIP).
Así, a lo largo de los primeros siete meses de 2020 los ingresos tributarios sumaron $3,4 billones, con un aumento interanual del 26,2%, es decir una caída de 13% en términos reales. Por cierto, el organismo oficial remarcó en un comunicado que “julio profundizó la desaceleración de la caída mostrada en junio, donde la recaudación alcanzó el 20,1%, valor muy superior al 12% de mayo y el 11 % de abril, cuando hubo mayores restricciones por el aislamiento social”.
Sin embargo, la merma sigue siendo explicada por «la caída en el nivel de actividad y las distintas medidas de política tributaria tendientes a aliviar la situación de los contribuyentes», afirmó.
Un elemento relevante es el elevado nivel de acogimiento a los distintos planes de facilidades de pago por deuda corriente. “Este comportamiento, que se traduce en una baja en los ingresos tributarios, no solo se explica por la dimensión de la crisis sino también por las modificaciones normativas y la ampliación de las herramientas disponibles para regularizar obligaciones”, concluyó la AFIP.