De acuerdo al informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la canasta básica alimentaria (CBA), que se utiliza como un índice para marcar la indigencia, registró una suba del 1,9% en febrero con respecto del mes anterior y del 51% en la comparación con el mismo mes de 2019. En total, se incrementó en $306 en relación a enero, cuando se necesitó $16.479.
En este sentido, una familia tipo, conformada por dos adultos y dos niños, necesitó en febrero $40.789,67 para no caer bajo la línea de pobreza y $16.785,87 para poder comprar los alimentos básicos y no entrar dentro del registro de indigente.
Por su parte, la canasta básica total (CBT), que traza la frontera con la pobreza, aumentó 1% en el mes y 47,9% interanual. Es decir, se necesitaron $490 más que en enero, cuando la CBA era de $40.300.
Cabe destacar que la canasta básica alimentaria (CBA) se ha determinado tomando en cuenta los requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos imprescindibles para que un varón adulto, de entre 30 y 60 años, de actividad moderada, cubra esas necesidades durante un mes.