El fideicomiso PPP es una de las trabas del presupuesto. La iniciativa del gobierno para asegurar el financiamiento de las obras a realizarse bajo el formato de participación público-privada figura entre los puntos que generan dudas en la oposición respecto a cómo va a funcionar.
Ayer, el peronismo no kirchnerista ( bloques Argentina Federal y UNA) dejó asentado su reclamo en una carta que envió al presidente de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de Diputados, Luciano Laspina; en la que plantea que el gobierno ha cambiado “drásticamente” la política económica respecto a los parámetros que figuran en el documento original, exigiendo “reelaboración total del proyecto de presupuesto”.
Si bien la oposición sabe que el oficialismo no dará lugar a semejante pedido, la movida busca flexibilizar la postura oficial respecto a algunos temas que parte de la oposición tilda de “invotables”. En esa lista figuran las condiciones planteadas para la reestructuración de la deuda, las atribuciones otorgadas al Jefe de Gabinete para asignar deuda a gastos corrientes, y el fondo fiduciario que el gobierno quiere poner en marcha para blindar el financiamiento de las obras de los PPP luego de que estallara el escándalo de los cuadernos.
Las obras licitadas bajo este formato serán clave para el gobierno en medio de una crisis que lo empujó al recorte masivo de obra pública, dado que le permite encarar los trabajos sin desembolsar dinero de las arcas del Estado. A pocos meses del comienzo de un año electoral, Cambiemos también deberá acordar con la oposición los detalles de este formato en el Presupuesto 2019.