En la provincia de Buenos Aires se acumularon más de 150 milímetros de agua debido a la lluvia. Sin embargo, el interior del país no tuvo la misma suerte. Las precipitaciones fueron menores en las regiones de Córdoba, Santa Fe y el centro sur de Entre Ríos.
Dado los cuatro meses de sequía en Buenos Aires, quienes trabajan los campos bonaerenses se sienten aliviados por las lluvias ocurridas ya que sirven para recuperar humedad. Por otro lado, esto no recupera todas las pérdidas de soja y maíz que hubo hasta el momento.
Paralelamente, el sector agrícola del interior del país fue el que obtuvo el panorama más desalentador ya que se encontraban ansiosos por mejores resultados. Es así como los productores siguen esperando las próximas lluvias en Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos.
En esta semana, se pronosticaron intensas tormentas que se desplegarán fundamentalmente en el norte entrerriano y el sur correntino. Las mismas afectarán también regiones vecinas al noreste de Santa Fe y Uruguay. Si bien las condiciones no son tan fuertes como las sometidas en la región bonaerense el fin de semana pasado, la zona está bajo una severa alerta meteorológica.