La Guía Estratégica para el Agro de la Bolsa de Comercio de Rosario, puso a disposición sus registros de los últimos diez años , y así pudo evaluarse la situación de la sequía en todo el país. En tanto, y según los datos de GEA, se pueden agrupar los meses de enero a agosto del 2018 en tres períodos.
Durante enero, febrero y marzo, el clima fue muy seco respecto a la media establecida, por lo que significó la peor sequía de los últimos 50 años, dejando una pérdida de 19,5 Mt de soja y 9,5 Mt de maíz.
Por su parte, el período comprendido entre abril y mayo da muestra de condiciones más húmedas respecto de la media, lo que generó un alivio para los suelos, permitiendo que se puedan sembrar los cultivos invernales y que puedan mantenerse en las condiciones adecuadas. No obstante, es necesario señalar que las temperaturas tuvieron un rol determinante ya que fueron frescas y estimularon el desarrollo de macollos.
En tanto, el trimestre de junio, julio y agosto, volvió a dejar resultados más secos que la media de los últimos diez años. La falta de agua disipó las expectativas de alcanzar los buenos resultados que obtuvo el trigo en 2017, de todos modos, la condición no fue del todo desfavorable por lo acontecido durante mayo y junio.
Finalmente, en lo que hace al periodo actual, es oportuno recordar que el mes empezó con déficit de agua, por lo que las siembras de maíz temprano se vieron limitadas y se mantienen algunas preocupaciones en cuanto al rinde final del trigo. Sin embargo, las lluvias registradas durante la segunda quincena de septiembre, da cierto respiro en algunas zonas del país.