Según el Informe Semanal Zona Núcleo de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario, a pesar de que en 2018 se sembraron 350 mil hectáreas más trigo, la producción apenas alcanzaría los 5,13 Mt, contra los 4,97 de la campaña pasada. En este sentido, aunque se sembró más y se fertilizó mejor, solo se producirán 160 mil Tn adicionales.
Con 8,3 quintales menos de rinde que el año pasado, la probabilidad del repechaje ante la sequía del verano se desvanece por la carencia de agua. Esto se debe a que del 30% de los trigos de la región que están comenzando el llenado de granos, gran parte de ellos se ubica en el centro-sur de Santa Fe y este de Córdoba, las áreas con las menores reservas de agua de la región.
Claramente, la necesidad de agua es inminente ya que afecta a su vez, los cuadros que vienen detrás, cómo el 40% que está en espigazón y floración, y el 30% restante que pertenece a los más atrasados. Como consecuencia de las heladas y falta de agua, en esta semana los cuadros en malas condiciones ocupan el 15% del área y los regulares el 25%. Los daños por ocasionados por las condiciones climáticas mencionadas en el sudeste de Córdoba fueron tan fuertes, que se está analizando la posibilidad de pasar un desecante para sembrarlos con soja de primera.