Sofía Corina, analista de mercados de la Bolsa de Comercio, profundizó en los detalles del informe: “Se sembró más que el año pasado, esto fue impulsado por buenos precios y una demanda muy activa a nivel local, además del contexto internacional que apoyó las cotizaciones”. Y añadió: “Se proyecta una mayor producción respecto del año pasado, la cebada sembrada en los campos argentinos cubre alrededor de un millón de hectáreas y se proyecta una producción de entre 3,8 y 4 millones de toneladas”.
No obstante, la integrante de la dirección de estudios e informaciones de la BCR, explicó que “al igual que el trigo, la cebada sufrió el tema de la sequía, el granizo y las heladas”, pero al tener un ciclo más corto que el del trigo hace que sus requerimientos hídricos sean menores y a su vez desocupa los lotes antes para que luego se siembre soja de segunda.
Además, anticipó: “Las compras de la campaña 2018/19 ya alcanzan las dos millones de toneladas, mientras que a esta misma fecha, el año pasado solamente había 670 mil toneladas, lo que significa un salto muy importante”.
Por último, en lo que respecta al stock mundial, Corina manifestó: “En base al Consejo Internacional de Cereales, el stock sería el mínimo de los últimos 23 años a raíz de las temperaturas muy altas y la escases de lluvia en los principales exportadores y productores de cebada del mundo. Esto hizo que las cotizaciones de los principales mercados como el de Francia o el Mar Negro suban a precios superiores a los 200 dólares por toneladas”.