La Secretaría de Agroindustria de la provincia de Buenos Aires está trabajando en una resolución que limita la aplicación de agroquímicos en 128 localidades bonaerenses con actividad económica.
Principalmente, la medida establecerá como «zonas de amortiguamiento» a determinados lotes que se encuentren próximos a áreas urbanas y residenciales. En estos espacios, los productores no solo tendrán que prever ciertas cuestiones tecnológicas y meteorológicas en las aplicaciones, sino que también deberán contratar a un profesional que se encargue de la aplicación de agroquímicos.
Dado que en los municipios de la provincia tienen sus propias reglas, la normativa busca “completar y homologar” la utilización pertinente y responsable de esas sustancias. En este sentido, el secretario de Agroindustria de Buenos Aires, Leonardo Sarquís, explicó a La Nación: “Es la primera vez que desde la provincia se realiza un documento de este estilo. Es una resolución para cuidar la salud de la población. Un decálogo que está firmado y avalado por mí”.
En tanto a la iniciativa que entrará en vigencia el 1 de enero del 2019, agregó: “Para los usuarios no es una sugerencia, es una obligación. Estamos invitando a los distritos a llegar a un convenio para ejercer el control de aquellos lotes que consideren oportunos. Así ellos podrán auditar el lote que crean necesario: oficiarán como nuestros ojos. El municipio que se adhiera contará con la ayuda y la asistencia de la secretaria para fiscalizar el uso de fitosanitarios en su localidad”.