El Gobierno da marcha atrás con la suba de impuestos a los biocombustibles. Luego de profusas negociaciones de las provincias que componen la Liga Bioenergética, diputados desistieron de modificar la carga tributaria. Las negociaciones continuarán con la Secretaría de Energía.
La estrategia oficial era modificar la Ley 26.093 a través del proyecto de Presupuesto, imponiendo un gravamen cada vez que se superen los actuales cortes del 10% en el caso del biodiésel y del 12% para el bioetanol.
El avance de tales modificaciones obligó a una rápida reacción de las provincias productoras para diluir la medida, advirtiendo el fuerte impacto que podría causar más peso tributario sobre la industria y la quita de incentivos para avanzar en energías renovables.
Ayer, tuvo lugar una reunión entre con legisladores y representantes de la Liga Bioenergética, conformada por Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán, Salta y Jujuy; en la que finalmente se confirmó que la suba de impuestos será desestimada. “Esto recién empieza, pero entendemos que hay que discutirlo desde otro lugar, de forma que se favorezca al consumidor y se mantenga la competitividad de la industria”, dijo el presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (CARBIO), Luis Zubizarreta, a BCRNews.